Palestina: La Vía Campesina acoge con satisfacción la formación del Grupo de La Haya y pide una participación global inmediata
La Vía Campesina, el movimiento global que representa a millones de campesinxs, pequeñxs agricultores, personas sin tierra, comunidades indígenas, migrantes y trabajadorxs agrícolas, acoge con satisfacción la creación del Grupo de La Haya por parte de los gobiernos de Belice, Bolivia, Colombia, Cuba, Honduras, Malasia, Namibia, Senegal y Sudáfrica. Esta alianza sin precedentes marca una intervención histórica y urgente en la lucha contra la impunidad y el genocidio en curso cometido contra el pueblo palestino.
La formación del Grupo de La Haya es una respuesta decisiva a la escalada de crímenes cometidos por la ocupación israelí, la potencia ocupante, y refleja el creciente consenso internacional de que las acciones deben reemplazar a las palabras. Mientras el mundo es testigo de la limpieza étnica, el apartheid y la destrucción sistemática en Palestina, encomiamos el compromiso de estas naciones de defender el derecho internacional y garantizar que los responsables de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad rindan cuentas. Como se afirma en su declaración conjunta inaugural, el grupo está “decidido a cumplir con nuestras obligaciones de poner fin a la ocupación israelí del Estado de Palestina y apoyar la realización del derecho inalienable del pueblo palestino a la libre determinación, incluido el derecho a su Estado independiente de Palestina” ( Grupo de La Haya, 2025 ).
En un momento en que las acciones genocidas de Israel han alcanzado niveles catastróficos, La Vía Campesina condena inequívocamente las recientes declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, que aboga por el desplazamiento forzado del pueblo palestino de Gaza. Sus comentarios, en los que propone la expulsión completa de los 2,3 millones de residentes de Gaza y la eliminación de la existencia palestina en su patria, exponen la brutal realidad del proyecto colonial en curso. El traslado forzado de población es un crimen de guerra y una grave violación del derecho internacional, prohibido explícitamente por la Cuarta Convención de Ginebra y clasificado como un acto de genocidio en virtud de la Convención sobre el Genocidio. La comunidad internacional no puede ni debe permitir que tales crímenes se desarrollen bajo su vigilancia. Como informó The Guardian, Trump sugirió que “la gente de Gaza debería ser reubicada en otro lugar, y la tierra debería usarse para algo mejor, tal vez incluso un complejo turístico” ( The Guardian, 2025 ).
La Vía Campesina siempre se ha solidarizado con el pueblo palestino. En una declaración de diciembre de 2024, tras una visita de solidaridad a Palestina, LVC destacó la “dramática aceleración de la colonización en Cisjordania, junto con el dramático deterioro de las condiciones de vida, trabajo y seguridad de lxs agricultores, pastores y sus familias, especialmente las mujeres y los niños” ( La Vía Campesina, 2024 ).
El Grupo de La Haya representa un momento crucial en la lucha global por la justicia y la rendición de cuentas. La Vía Campesina hace un llamamiento a todos los gobiernos para que se unan inmediatamente al Grupo de La Haya y participen activamente en su misión de defender el derecho internacional y proteger al pueblo palestino de los continuos crímenes de guerra y la limpieza étnica. Además, instamos a todas las organizaciones miembros de La Vía Campesina y a los movimientos aliados en todo el mundo a que apoyen y se movilicen públicamente a favor de los esfuerzos del Grupo de La Haya, garantizando que esta iniciativa conduzca a acciones políticas y legales concretas contra la impunidad israelí. El tiempo de los gestos simbólicos ha pasado; ahora se requieren acciones concretas para desmantelar las estructuras de la ocupación, el apartheid y el colonialismo de asentamiento.
En solidaridad con el pueblo palestino y todas las comunidades oprimidas que resisten el despojo, La Vía Campesina reafirma su compromiso inquebrantable con la justicia, la soberanía alimentaria y la autodeterminación. El Grupo de La Haya debe servir de vehículo para la adopción de medidas decisivas que hagan cumplir el derecho internacional y pongan fin a la impunidad que ha envalentonado a los perpetradores del genocidio.