Pese a la violencia del Estado el Paro se mantiene en Colombia
Las protestas desatadas por la reforma tributaria del presidente Duque han trascendido a una manifestación nacional por injusticias de carácter histórico y la profundización de la crisis económica a raíz de la pandemia. El pueblo colombiano, que protesta desde el pasado 28 de abril, se enfrenta hoy al terrorismo de Estado.
El proyecto de reforma tributaria radicado por el presidente Duque el 5 de abril de 2021 –que seguía la visión del Fondo Monetario Internacional (FMI)-, tenía por objetivo el recaudo de 23 billones de pesos mediante el incremento de impuestos a la canasta familiar y los ingresos del trabajo de las capas medias, al tiempo que mantenía los beneficios tributarios de las grandes empresas, que le cuestan al país $ 94 billones de pesos anualmente[1].
En Colombia, las exenciones y descuentos tributarios a grandes empresas vienen en aumento desde hace 3 años, el sector más beneficiado es el financiero, le siguen comercio, minas y petrolero. Bajo la lógica del actual gobierno neoliberal, fueron las grandes empresas quienes recibieron subsidios para afrontar la crisis generada por la pandemia; entretanto, colombianos hambrientos izaban telas rojas en sus casas, clamando por ayuda.
La crisis generada por el COVID-19 provocó que la cuarta parte de los hogares colombianos pasaran de alimentarse 3 a 2 veces al día. Esto en un contexto donde el índice de pobreza ascendía al 42,7% y la indigencia al 15,1 %. Debe precisarse que, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, un hogar colombiano tiene pobreza monetaria cuando el ingreso mensual por persona es inferior a los 331.688 pesos (USD 90) y pobreza extrema o indigencia cuando el ingreso es inferior a 145.000 pesos (USD 39,3)[2].
El estallido social desatado por la reforma tributaria es también producto de la crisis de seguridad, el recrudecimiento de la violencia y el incumplimiento del Acuerdo de Paz por parte del gobierno. Actualmente, el incremento en los niveles de violencia está equiparando los registrados en la década de 1995 al 2005, la más violenta del conflicto armado. El incremento de la presencia territorial de los distintos grupos armados ilegales, principalmente paramilitares, acrecienta fenómenos de violencia y terror orientados a lograr el control territorial. Sólo en el 2020 se registraron 91 masacres con 381 víctimas y, en los primeros cuatro meses de 2021, ya se registran 35 hechos de este tipo, con 132 víctimas.
Ya son 1.172 personas líderes sociales asesinadas desde la firma del Acuerdo de paz[3]. Sólo en el 2020 se registró el asesinato de 310 personas líderes sociales y entre el 01 de enero y el 09 de mayo de 2021 ya se registran 62 víctimas. La mayoría de los asesinados son líderes de comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes que son confrontados por grupos armados al servicio de intereses económicos y políticos, incluidos narcotraficantes, acaparadores de tierras y recursos naturales.
La incontenible inconformidad de la población colombiana frente a la realidad política, económica y social del país desencadenó las multitudinarias manifestaciones que se vienen desarrollando desde el pasado 28 de abril. La magnitud de las jornadas de protesta que se viven actualmente en Colombia no se registraba desde el gran Paro Nacional de 1977. En los primeros 19 días de movilizaciones se reportaron 7.532 actividades en 784 de los 1.120 municipios del país: 1.557 marchas, 3.559 concentraciones, 1.744 bloqueos y 387 movilizaciones (desplazamiento de personas en vehículos)[4].
Las demandas del pueblo movilizado no han sido escuchadas por el gobierno. Duque se niega a dialogar, ha dilatado la negociación y recurre a la militarización y la represión para silenciar el inconformismo de la población: 43 manifestantes han sido asesinados por miembros de la Fuerza Pública, 33 víctimas de agresiones oculares, 1139 han sido detenidos arbitrariamente, 18 víctimas de violencia sexual, más de 500 personas desaparecidas[5] y 384 víctimas de violencia física.
Se reportan, asimismo, otras prácticas violentas como el uso de gases lacrimógenos en zonas residenciales, el uso irregular del lanzador de proyectiles Venom o el lanzamiento de gases lacrimógenos desde helicópteros[6]. Se han presentado casos en los que los policías salen vestidos de civil o sin la debida identificación, a amenazar con arma de fuego y capturar manifestantes.
Uno de los hechos más reprochables fue el ataque de civiles armados, en compañía de agentes de policía, contra la minga indígena. El pasado 9 de mayo, 4 chivas y 2 camionetas de la minga salieron de Santander de Quilichao hacia Cali, una de las camionetas, donde iba un consejero indígena, fue detenida por habitantes de un barrio pudiente de Cali. Cuando mingueros llegaron a apoyar al consejero, fueron atacados con fusiles de asalto por civiles que, según se registra en videos, estaban acompañados de policías[7]. 10 indígenas resultaron heridos por disparos.
Igualmente, se ha filtrado información de reuniones de empresarios con el partido de Gobierno donde se solicita la militarización o el decreto de la conmoción interior, y la manipulación de medios de comunicación para criminalizar las movilizaciones[8].
El terror desatado por el Estado no ha logrado amilanar la decisión de lucha del pueblo colombiano. Transcurridos más de 20 días de paro, las victorias de la movilización popular se expresan en el retiro del proyecto de reforma tributaria, el hundimiento en el Congreso del proyecto de reforma a la salud, las renuncias del Ministro de Hacienda y la Ministra de relaciones exteriores, la reasignación de una parte de los recursos de guerra para la financiación de la educación superior de estratos bajos y la exploración de diálogos con el ELN. Tal vez la victoria más importante de la movilización popular sea el aislamiento del genocida de Uribe y su proyecto fascista, hoy rechazado en el consenso de las fuerzas movilizadas.
Duque, que se niega a asistir a las reuniones con el Comité del Paro, anunció el domingo 17 de mayo que las fuerzas militares desplegarán su máxima capacidad operacional para desbloquear las vías en todo el territorio nacional. Este anuncio lo hizo después de que el comité del paro convocara una movilización nacional el 19 de mayo.
El neoliberalismo encarnado en el gobierno declara la guerra al pueblo movilizado, que ha ganado confianza y la opción de gestionar nuevos cambios; la proclama de la violencia no tiene presente que los procesos sociales no se detienen ni con el crimen, ni con la fuerza.
[1]Semana (08 de enero de 2021) Las billonarias gabelas que recibirán las empresas en pleno año de reforma tributaria Recuperado de: https://www.semana.com/economia/articulo/las-billonarias-gabelas-que-recibiran-las-empresas-en-pleno-ano-de-reforma-tributaria/202100/
[2] UN Periódico (10 de mayo de 2021) La miseria, una seria enfermedad social. Recuperado de: https://unperiodico.unal.edu.co/pages/detail/la-miseria-una-seria-enfermedad-social/
[3] Desde la firma del Acuerdo de Paz, en noviembre de 2016, al 9 de mayo de 2021. INEPAZ. Al respecto ver: http://www.indepaz.org.co/lideres/
[4]Balance General Paro nacional – 2021. Ministerio de Defensa. Recuperado de: https://twitter.com/mindefensa/status/1394272778182856714
[5] W Radio (10 de mayo de 2021) Las cifras de la ONG Temblores sobre casos de violencia policial Recuperado de: https://www.wradio.com.co/noticias/actualidad/las-cifras-de-la-ong-temblores-sobre-casos-de-violencia-policial/20210510/nota/4133566.aspx
[6] Tu Barco (05 de mayo de 2021) Alcaldes del Valle molestos por ‘arremetida’ del Esmad, en Buga el gas sacó hasta a los niños de las casas. Recuperado de: https://tubarco.news/tubarco-noticias-occidente/tubarco-noticias-valle/alcaldes-del-valle-molestos-por-arremetida-del-esmad-en-buga-el-gas-saco-hasta-a-los-ninos-de-las-casas/
[7] Noticias Uno (10 de mayo de 2021) 9 de mayo, peor día de anarquía en Cali civiles contra civiles con armas, palos y ataques Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=wtjXvxcRmj0&list=PLhqS9Rdwsv9hZI7_Pa5g4U3VqF5waUDyV&index=6
[8] El Espectador (12 de mayo de 2021) La “legítima defensa” y otras propuestas del uribismo y empresarios en Pereira para frentear el paro nacional. Recuperado de: https://www.elespectador.com/colombia2020/pais/la-legitima-defensa-y-otras-propuestas-del-uribismo-y-empresarios-en-pereira-para-frentear-el-paro/