La Vía Campesina saluda a las fuerzas vivas de Marruecos, tras la marcha popular del 15 de julio en Rabat. Asimismo, llama a la liberación de los presos del Hirak del Rif y de todos los movimientos sociales, es importante abrir una investigación sobre la tortura, malos tratos que han sufrido, además es indispensable, atender a sus reivindicaciones.
(Harare, 3 de Agosto) Nosotrxs, La Vía Campesina, el movimiento campesino internacional, al conocer los veredictos y de las severas sentencias de prisión firme dictadas contra 52 detenidos del movimiento social del Rif, en el norte de Marruecos, procesados ante la cámara penal de primera instancia del Tribunal de Apelaciones de Casablanca, expresa su solidaridad y rechaza este tipo de acciones que criminalizan luchas legítimas.
Las sentencias llegaron a 20 años de prisión firme para cuatro activistas, incluido el líder del Hirak Nacer Zefzafi, 15 años para otros tres y 10 años para siete. Otros diez fueron condenados a 5 años de prisión firme, ocho a tres años y veinte activistas a dos años, o sea más de tres siglos en total.
En la mayoría de los casos, los detenidos han sido acusados de incitar, participar o ser cómplices en actos de desorden público, pero sin dar ninguna prueba de responsabilidad penal individual por actos de violencia; las manifestaciones no autorizadas no son motivo de prisión mientras se mantengan pacíficas. ¿Desde cuándo reclamar alternativas económicas es considerado una amenaza al orden público?
El Hirak del Rif se inició en octubre de 2016, tras la muerte de Mohssine Fikri, un pescador de la ciudad de Alhucemas, aplastado por el compresor de un camión de basura, en una escena humillante y surrealista. El movimiento pacífico que siguió, después de seis meses de reivindicaciones a las que el estado marroquí no encontró otra respuesta más que la represión, dio como resultado el arresto de cientos de manifestantes, muchos de los cuales sufrieron torturas, malos tratos, y fueron condenados a más de 1.000 años de prisión.
El Hirak del Rif no es el único movimiento social actualmente reprimido en Marruecos. En muchas regiones, indígenas “amazigh” y rurales en particular, la población que vive principalmente de la agricultura se enfrenta a la represión e incluso la tortura y la prisión, si reclama su derecho al desarrollo y a las riquezas de su tierra. Este es el caso de Yerada, Zagora, Seraghna, Imider, Oulmes, Outat Lhaj y muchas otras regiones.
En ese sentido, como La Vía Campesina:
- Expresamos nuestra indignación por los juicios injustos y parciales de los activistas de los movimientos sociales que se manifestaron pacíficamente por reivindicaciones sociales y económicas legítimas.
- Exigimos la anulación de estas penas y la liberación inmediata de los detenidos, que reclamaron sus derechos fundamentales en manifestaciones pacíficas, ya sea en el Rif, Yerada u otras localidades,
- Expresamos nuestro apoyo a los detenidos y a sus familias, y pedimos abrir una investigación sobre las denuncias de tortura, formuladas por los detenidos durante el juicio.
- Recordamos que las reivindicaciones del Hirak del Rif son derechos fundamentales que Marruecos se compromete a garantizar a sus ciudadanos, y exigimos que el Estado marroquí cumpla con sus compromisos en materia de derecho al desarrollo y de lucha contra la pobreza y la marginación.
- Saludamos a todas las organizaciones y fuerzas vivas de Marruecos, que salieron a las calles para expresar su descontento el 8 de julio en Casablanca y el 15 de julio en Rabat, para expresar su solidaridad con los activistas del Hirak en Marruecos detenidos arbitrariamente, y exigir su liberación, y especialmente a nuestros compañerxs en la Federación Nacional del Sector Agrícola.
Finalmente, afirmamos nuestra solidaridad con todos los movimientos sociales de Marruecos, y las formas de protesta adoptadas por el pueblo marroquí que lucha por su dignidad.
¡Globalicemos la lucha, globalicemos la esperanza!
