Perú: FEMUCARINAP en el día de la Madre Tierra
Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú – FENMUCARINAP, quiere este 22 de abril, designado por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas como Día Internacional de la Madre Tierra, de nuestra Pachamama, reflexionar sobre su importancia como fuente y sostén de vida para todas las mujeres y hombres que amorosamente acoge y las consecuencias de que a menudo esa bondad no sea correspondida.
La Organización de las Naciones Unidas, en abril de 2009, solicitó que sus Estados Miembros, así como los organismos internacionales, regionales y subregionales, las organizaciones no gubernamentales y la sociedad civil, celebren el Día Internacional de la Madre Tierra y creen conciencia de nuestra responsabilidad colectiva de cuidarla como a un ser vivo, de vivir en armonía con la naturaleza, en estos tiempos en que la explotación insostenible de los recursos naturales y la contaminación de las tierras y mares con productos químicos que ponen en peligro el único hogar que tenemos como seres humanos y originan, entre otras catástrofes un cambio climático global que amenaza el futuro de nuestra supervivencia, junto con la de muchas otras especies.
Celebremos a la Pachamama – la Madre Tierra- en éste su Día Internacional, renovando nuestra promesa de respetarla y luchar por hacerla respetar, reenfocando las economías hacia el aseguramiento del Buen Vivir para todas y todos, en vez de que siga dominada por el apetito comercial de grandes monopolios y oligopolios orientados a abastecer el consumismo desmesurado de una minoría que se hace cada vez más rica y poderosa a costa del aumento de la injusticia y la pobreza en el mundo, la profundización de las desigualdades en nuestro país y el sacrificio del bienestar de las futuras generaciones, de nuestros hijos y nietos.
Las mujeres de nuestra federación somos, como la Tierra, el Agua y la Semilla, fuente de vida; nos identificamos con la Pachamama como sus hijas, guardianas de sus ecosistemas y de la gran biodiversidad peruana que, respetuosamente aprovechada, asegura nuestro sustento y nos habrá de permitir adecuarnos a los retos del cambio climático.
Por ello, más que un homenaje simbólico a la Tierra, reclamamos a todos los hombres y las mujeres del Perú, en especial a sus gobernantes, promover, apoyar y defender una Política Agraria que priorice defensa de la Soberanía Alimentaria fortaleciendo la agricultura familiar campesina, indígena; que rescate y respete la cultura de los pueblos originarios y aproveche su sabiduría para un verdadero desarrollo regional y local entendido como Buen Vivir; que conserve la vida megadiversa, limitando y condicionando las actividades extractivas, para conservar y dar uso prioritario al agua en la actividad agropecuaria y el consumo humano; que no mida el “progreso” por el lucro sino por los índices de desarrollo humano.
Exigimos, en ese sentido, una autocrítica y un cambio de rumbos a las autoridades del país, que escuchen principalmente la voz de los pueblos, en vez de mirar por los ojos de los grandes empresarios. Pedimos a nuestros y nuestras representantes en el Congreso, que ratifiquen la aprobación de la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutricional y comprendan que sin Soberanía Alimentaria no habrá seguridad verdadera ni duradera. Pedimos primero asegurar el consumo nacional de nuestros productos nativos, como la quinua, con precios al alcance del pueblo, antes que su exportación. Que siga el bloqueo a los transgénicos.
El Consejo Directivo
FENMUCARINAP