El Salvador: Declaración para una Ley de Soberanía Alimentaria
EL SALVADOR, 22 DE JULIO DEL 2011
Reunidos en la ciudad de San Salvador, El Salvador en Centroamérica las organizaciones de la Vía Campesina, aglutinadas en el Consejo Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC), preocupados por la aguda crisis alimentaria, la falta de oportunidades para desarrollar integralmente el sector y los intentos realizados por el gobierno del cambio que intentan superar las dificultades, unimos nuestras voces desde las organizaciones campesinas para promover una Ley de Soberanía Alimentaria.
Desde el Movimiento campesino consideramos que no se puede cambiar el actual sistema sin destruir el viejo modelo, la única forma de romper con las estructura de este sistema, es mediante las alianzas, la promoción de una real y verdadera Reforma Agraria, y la aplicación de una legislación nacional alrededor de la Soberanía Alimentaria, convencidos que una agricultura con campesinas (os) es la única garantía para solucionar los problemas del hambre en el país.
Las organizaciones de la Vía Campesina de El Salvador luchamos por la Soberanía Alimentaria, por el derecho de las campesinas, campesinos, indígenas, pescadores/as artesanales, consumidores/as: a la tierra, a las semillas, a compartir sus conocimientos ancestrales, a fortalecer las experiencias en economías solidarias del cuido y auto cuido, en armonía con la Madre Tierra.
La crisis actual también es una oportunidad, solo juntos y unidos podemos crear nuevas formas de sobrevivencia, solidaridad, sustentabilidad y soberanía, construir alternativas para los pueblos y desde los pueblos con la Madre Tierra para el Buen Vivir y por los bienes comunes en nuestros territorios.
DECLARAMOS:
Las Organizaciones del Consejo Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC) miembros de la Vía campesina, nos declaramos en sesión permanente e iniciamos una fuerte lucha de movilización para obtener la aprobación y promulgación de la Ley de Soberanía Alimentaria y Nutricional, para asegurar el mejoramiento de las condiciones de vida en el campo Salvadoreño, poner en manos de los actores principales un instrumento que garantice el cambio de modelo productivo y la alimentación del pueblo.
Ratificamos nuestra voluntad política desde el movimiento campesino para acompañar el proceso de creación, aprobación, reglamentación y divulgación de la Ley de Soberanía Alimentaria, aprovechando el contexto aun persistente del espíritu de los Acuerdos de Paz.
Rechazamos rotundamente las intenciones de la empresa privada y el gobierno que pretende aprobar una Ley de Arrendamiento de Tierras con la finalidad de concentrarlas en pocas manos, dejando a las cooperativas y pequeños productores sin el acceso, uso y tenencia de la tierra para producir alimentos
Nos pronunciamos porque el Gobierno y la Asamblea Legislativa realicen las acciones necesarias para que la empresa privada cumpla con sus obligaciones tributarias y contribuyan de esa manera al desarrollo del sector agropecuario.
Exigimos la reactivación de los Centros de Acopio del Instituto Regulador de Abastecimiento para garantizar la reserva alimentaria del pueblo salvadoreño y de esa forma apoyar a los pequeños productores en la comercialización y al consumidor con la distribución de productos agropecuarios, inocuos, accesibles y a buen precio.
Finalmente invitamos a las organizaciones campesinas y a la sociedad en su conjunto a sumarse a la discusión, movilización y lucha por lograr la aprobación de la Ley de Soberanía Alimentaria, este proceso debe ser de todo el pueblo por la trascendencia de este proceso que tendrá como objetivo asegurar la alimentación, el mejoramiento de las condiciones productivas, el acceso a productos básicos a bajos costos y la distribución en el mercado local de bienes y servicios a precios justos.
Llamamos a la clase política, empresarios, gobernantes y en especial a los diputados de la Asamblea Legislativa para que actúen de forma beligerante y coherente en la formulación de una Ley de Soberanía Alimentaria, para que la sociedad salvadoreña pueda satisfacer sus demandas alimentarias, en mejores condiciones, conforme los planteamientos de la FAO, y declaraciones emanadas por la Vía Campesina Internacional.
Globalicemos la Lucha…
Globalicemos la Esperanza…