Conferencia de la FAO debe ser inicio del debate
La 2ª Conferencia Internacional sobre Reforma Agraria fue realizada en forma precipitada y, por lo tanto, no puede tener un carácter concluyente. Esa es la posición de la Vía Campesina Internacional, presentada en entrevista colectiva en la tarde del domingo (05/03), en Porto Alegre. La organización considera positiva la discusión sobre Reforma Agraria promovida por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), pero cuestiona su forma de organización, que fue hecha de prisa, lo que perjudicó la participación y, consecuentemente, afectará la calidad del debate y de las propuestas que pueden ser lanzadas durante el encuentro.
"La Conferencia no debe divulgar ninguna carta de principios ni plan de acción. Ella debe servir como un espacio para la acumulación de conocimientos y la integración entre los diversos campesinos del mundo, contemplando un próximo encuentro, más articulado, para de aquí a 3 o 4 años", defiende Egídio Brunetto, del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST). Él señala la poca participación de jefes de Estado y el bajo número de países representados como indicios de la falta de representatividad del encuentro. "Eso es grave, porque demuestra la falta de interés de los gobiernos en hacer la Reforma Agraria", agrega. La Vía Campesina cree que no hubo, en el proceso de construcción de la conferencia, un proceso de discusión sobre Reforma Agraria en los distintos países involucrados. "El pueblo del campo no sabe de la existencia de esa Conferencia", afirma el hondureño Rafael Alegría, integrante de la organización campesina Cococh.
Reforma Agraria de mercado
En la rueda de prensa, la Vía Campesina reiteró sus críticas al modelo de reforma agraria del Banco Mundial. Para la organización, esa institución se basa en la financiación de la compraventa de terrenos, y no en la expropiación de los latifundios, lo que termina transformando la tierra en mercancía. La canadiense Nettie Wiebe, de la National Farmers' Union, relató la trágica experiencia promovida por el Banco Mundial en Canadá, uno de los países considerados como laboratorio de sus políticas. "Actualmente, más de dos tercios de las familias campesinas dejaron la tierra. Las que quedaron están endeudadas y empobrecidas, a pesar de la gran productividad del país", contó. Solamente en 2005, más de dos mil campesinos de la región de Bangalore, en el sur de la India, se suicidaron debido a las deudas con financieras.
Rafael Alegría afirmó que la cuestión de la tierra es un problema mundial. En ese sentido, la Vía Campesina está lanzando la Campaña Global por la Reforma Agraria, la cual involucra a organizaciones campesinas de Asia, de Europa y de las Américas. "En la campaña, además de la importancia de la reforma agraria, denunciamos la criminalización de los movimientos sociales por los cuerpos policiales y por los gobiernos", relata. En la campaña, la responsabilidad de los gobiernos en adoptar la reforma agraria como acción política de los Estados también estará presente. "En ese momento, hay ocupación de tierras en todas las regiones del mundo. Por eso, pedimos a Lula que haga la reforma agraria inmediatamente, y también reforzamos el mensaje a Evo Morales, presidente de Bolivia. Finalmente, el hambre no espera", concluye.
Daniel Cassol e Igor Felippe Santos
Minga Informativa-Vía Campesina