Brasil: Dirigente del MST “El luto por Marielle seguirá siendo lucha”
La Dirigente Nacional del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra, MST, Marina Dos Santos, comenta las movilizaciones en repudio al asesinato de Marielle Franco y su chofer.
El último jueves (15) los militantes por la reforma agraria se sumaron a las movilizaciones realizadas en distintas ciudades del país para condenar el asesinato de la concejala de Rio de Janeiro, Marielle Franco (PSOL) y de su chofer Anderson Gomes. La repercusión de la ejecución de Marielle ha tenido gran impacto en los medios de comunicación nacional e internacional, destacando la actuación de la parlamentaria ante a las violaciones de los derechos humanos en las favelas cariocas.
Marina Santos, carioca y dirigente nacional del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), en entrevista al Brasil de Fato, comenta sobre la fuerte conmoción nacional generada por el crimen brutal contra la parlamentaria, y hace un llamamiento para que el luto por la muerte de Marielle se transforme en combustible para la lucha.
Brasil de Fato: Marina, hace muchos años que Brasil no vivía una conmoción tan grande como lo ocurrido el último jueves, después del asesinato de la concejala Marielle Franco y su chofer Anderson Gomes. ¿Qué mensaje ha intentado trasmitir el pueblo a través de estos actos realizados por todo el país?
Marina dos Santos: Ayer fue un día de indignación colectiva. Toda la militancia de los movimientos sociales, partidarios y sindicales, salieron a las calles para protestar, solidarizarse y exigir del Estado acciones punitivas contra los responsables por esta brutalidad ocurrida en Rio de Janeiro. Fue una demonstración para Brasil y para el mundo de que intentaron robarnos la voz, intentaron callar y silenciar todo el conjunto de la izquierda, y no solamente a Marielle. Sin embargo, el movimiento popular sindical y partidario contestó con una importante demonstración de fuerza en las calles diciendo: “si nos tocan a una, nos tocan a todas”.
¿Crees que aquellas personas que salieron a las calles, además de la indignación por la muerte de la concejala, también mostraban una insatisfacción con las políticas del gobierno, sobre todo en materia de seguridad pública?
Las manifestaciones también reflejan la insatisfacción con las medidas del gobierno golpista, ya sea con la intervención militar en Rio de Janeiro, ya sea con la falta de políticas públicas que combatan realmente la desigualdad social y la criminalidad. Creo que las manifestaciones del día 14 dejaron claro que el pueblo, la sociedad, el país no está de acuerdo con la intervención militar en Rio de Janeiro y, al revés de lo que el gobierno federal piensa, la intervención militar estimula la criminalización, la pobreza y la violencia contra los pobres y los negros, especialmente en las favelas. Creo que son necesarias políticas de empleo, fortalecimiento del sueldo mínimo y educación para la juventud urbana. Es necesario combatir el crimen y la violencia no con medidas, ni con una intervención militar que, en la práctica, lo único que hacen es fortalecer este proceso de criminalización de la pobreza.
¿Cómo crees que es posible superar esta realidad de violencia contra los luchadores sociales, que también afecta el MST?
El caso de Marielle y Anderson claramente se encuadra en el proceso de violencia y criminalización de liderazgos de los movimientos populares, como ya viene sucediendo con los trabajadores sin tierra. En Brasil, solamente en este período de la postguerra, han sido más de 100 asesinatos de líderes campesinos e indígenas en Pará. Para superar esta realidad, la única posibilidad se da a través de reformas estructurales, profundas, como la implementación de una reforma agraria popular, una reforma urbana, una reforma tributaria y el combate a los monopolios de los grandes medios de comunicación. Y, para ello, esperamos que el pueblo verdaderamente ocupe las calles y promueva todo tipo de lucha que ayude a superar este momento difícil que Brasil está viviendo. Que combata las políticas de maldades contra la clase trabajadora y que nosotros conquistemos una paz verdadera, principalmente en los grandes centros urbanos y en las favelas de este país.
¿Esta realidad de violencia se agravó con el golpe de estado en 2016?
Claro. Y este asesinato cobarde y brutal de Marielle y su chofer evidencia la faceta del golpe institucional que Brasil vivió recientemente, evidencia la fragilidad de nuestra democracia. Es un crimen que refleja la bárbara y vergonzosa situación a la que nuestro país está enfrentando.
El caso de Marielle tuvo una fuerte repercusión nacional e internacional. ¿Cuáles pueden ser los desdoblamientos de estas movilizaciones?
En varios países del mundo ha habido manifestaciones en las que se ha exigido muchas cosas al Estado brasileño. Es muy duro que el precio de la lucha sea la vida de Marielle y de tantos jóvenes pobres de Brasil que son asesinados todos los días. Pero yo creo que el luto de Marielle seguirá siendo lucha. Tenemos todos los elementos para que esta conmoción nacional se transforme en un gran movimiento de luchas, de toma de las calles, de ascensión de la clase trabajadora. El poder indignarse y demonstrar nuestra indignación ante tanta injusticia contra la clase trabajadora brasileña, tal vez sea el desafío que nosotros tenemos en este momento. Necesitamos superar la fragmentación dentro de la izquierda y unirnos contra el golpe, contra el paquete de maldades que está siendo implementado por el gobierno y que representa una fuerte retirada de derechos de los trabajadores. Creo que la sangre derramada de esta joven luchadora, asesinada cruel y cobardemente, nos puede ayudar a cumplir este papel de dar unidad a los movimientos sociales, al conjunto de los partidos políticos, al movimiento sindical, en fin, a la clase trabajadora de Brasil.
Por Leonardo Fernandes
Fuente: Página MST
Publicado en: Brasil de Fato
Traducido por: Amanda Verrone