Una nueva guía para promover el derecho a las semillas
Proteger y elevar los derechos de la población rural es esencial para la soberanía alimentaria en un contexto de cambio climático, rápida pérdida de biodiversidad y pandemias. Una nueva guía establece un camino innovador para orientar las políticas transformadoras a nivel nacional e internacional.
Lxs campesinxs y los pueblos indígenas alimentan a más del 70 por ciento del mundo y son agentes clave en la preservación de la diversidad biocultural en los sistemas alimentarios. La importancia de las semillas, los conocimientos tradicionales y las innovaciones se han reconocidos cada vez más como un factor crucial en los esfuerzos para detener la rápida pérdida de biodiversidad, incluso en el contexto del desarrollo de un nuevo Marco Mundial para la Biodiversidad en el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB).
El derecho a la semillas de lxs campesinxs y los pueblos indígenas está consagrado en acuerdos internacionales como el Tratado Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (TIRFAA), la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (DNUDPI) y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. Campesinos y otras personas que trabajan en zonas rurales (UNDROP).
“En todo el mundo, campesinxs y pueblos indígenas cuidan sus semillas para producir alimentos y cuidar los ecosistemas. La pandemia de COVID-19 ha demostrado una vez más que nuestros sistemas de semillas son fuertes y resistentes.”
(David Cidi Otieno, Liga Campesina de Kenia – La Vía Campesina)
¡Derecho a las semillas amenazado!
Actualmente, los sistemas alimentarios y las prácticas de gestión de semillas de lxs campesinxs y los pueblos indígenas están amenazados por los alimentos producidos industrialmente, las leyes restrictivas sobre semillas, los reclamos de propiedad intelectual y la modificación genética. La expansión de la agricultura industrial ha venido acompañada de una dramática disminución de la biodiversidad agrícola.
Según las Naciones Unidas, el 75 por ciento de la diversidad de cultivos se ha perdido durante el siglo pasado. La humanidad depende de solo seis cultivos principales para alimentarse.
Restaurar la biodiversidad es fundamental para adaptar los sistemas agrícolas al cambio climático. Sin embargo, los derechos de propiedad intelectual, que son introducidos por organizaciones como la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV) y los acuerdos comerciales, restringen los derechos de los campesinos y los pueblos indígenas a guardar, usar, intercambiar y vender sus semillas. Las nuevas tecnologías, como la información de secuencia digital (DSI) y la edición del genoma, plantean nuevas amenazas a las comunidades agrícolas y corren el riesgo de socavar los acuerdos internacionales existentes, como el ITPGRFA y el CBD.
“Las leyes de semillas existentes están hechas para la industria de semillas y la agroindustria. Participamos en el Tratado [TIRFAA] para reafirmar que nuestro derecho a las semillas es un derecho humano, que es superior a los derechos de propiedad intelectual.”
(Alimata Traoré, Presidenta de la Convergencia de Mujeres Rurales por la Soberanía Alimentaria en Mali)
Por el momento, el desafío sigue siendo implementar los derechos de lxs campesinxs y los pueblos indígenas en las políticas y leyes nacionales. Por tanto, se necesitan con urgencia nuevos esfuerzos.
Lanzamiento de una nueva guía sobre el derecho a las semillas
Lanzada en la ocasión en una nueva ronda de discusión en el TIRFAA, una nueva guía titulada “Recuperar el ciclo de la sabiduría: Luces para realizar el derecho a las semillas. Guía para la implementación de los derechos de lx agricultorx” formula propuestas concretas al respecto.
La guía tiene como objetivo proporcionar herramientas para apoyar a las organizaciones de pueblos indígenas, de campesinxs y en su trabajo para promover la plena realización de sus derechos de lx agricultorx.
“Esta Guía es oportuna y necesaria. Contiene la autoridad y la sabiduría de las personas que cuidan las semillas.”
(Michael Fakhri, Relator Especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación)
Esta publicación es un trabajo conjunto del Grupo de Trabajo sobre Biodiversidad Agrícola del Comité Internacional de Planificación para la Soberanía Alimentaria (CIP), FIAN International y Centro Internazionale Crocevia.