Situación de la participación de los jóvenes en la agricultura en África.
(Harare, 15 de diciembre de 2013) Según la edad promedio, África es un continente joven: de acuerdo con los últimos datos, entre el 60 y el 70 por ciento de la población es menor de 30 años. Sin embargo, los que se ocupan de la agricultura son los viejos, los enfermos y los jubilados. Los jóvenes dejan el campo en busca de oportunidades en zonas urbanas en desarrollo o migran a países vecinos. El éxodo de jóvenes de las zonas rurales también significa el abandono de la agricultura, lo cual condena a África a un futuro sin sucesores de productores agropecuarios de fibra alimentaria. Los jóvenes también tienen más educación para ser intelectuales, doctores, licenciados, etc.; mientras que los más viejos se quedan en el campo: Una participación activa de los jóvenes conlleva una mayor capacidad de aprendizaje y la aplicación de tecnologías modernas que impulsen la producción agrícola; tecnologías aplicadas al procesamiento y a los nuevos métodos de gestión de este siglo aplicadas a la cadena de valor, desde la producción a la comercialización.
Perder a los jóvenes significa además perder el futuro y las posibilidades de modernizar, mejorar la producción y competir con éxito en un mundo globalizado. La escasa participación de los jóvenes en la agricultura y la falta de un compromiso enérgico con ella hacen que África esté pasando por problemas como la inseguridad alimentaria, la pobreza y la dependencia continua de las importaciones y de la ayuda alimentaria a través de la caridad (que sigue en aumento).
Es en este escenario – que verdaderamente no es ninguna especulación, sino la pura realidad – donde en este caso deben tomarse todas las medidas necesarias para incentivar a los hombres y mujeres jóvenes para que se comprometan con la agricultura. Aunque lo más probable es que únicamente lo hagan si ven en la agricultura un sector interesante donde obtener ingresos.
Vale la pena repetir que África solamente podrá garantizar la sustentabilidad de su agricultura si la juventud se compromete con el sector. Por ahora, lamentablemente la mayoría de los agricultores son personas mayores, los jóvenes son pocos ya que no existen inversiones para atraerlos a esa actividad económica; también hay poca difusión de tecnologías modernas que puedan llamar su atención y plantearles algún desafío. La agricultura actual está sujeta a elevados riesgos, como el clima y un mercado inestable y, a menudo, muy poco rentable.
Estos son los factores que desalientan a los hombres y las mujeres jóvenes y que, si se revirtieran, se podría superar el problema.
He aquí las opiniones de los hombres y mujeres jóvenes que se dedican a la agricultura, los que están en la escuela y los que están buscando trabajo:
En los países subdesarrollados también se proyecta una imagen negativa de la agricultura: quieren que los jóvenes estudien para salir de la pobreza construyendo universidades solamente en las grandes ciudades.
También las actitudes sociales negativas de la juventud misma, influenciada por los medios “Globalizados”.
En un caso se menciona que los padres educan a sus hijos justamente para que escapen de la agricultura.
Los agricultores son trabajadores no calificados, sin instrucción y tienen una muy baja retribución económica.
Los agricultores son un grupo vulnerable y empobrecido.
Algunos ejemplos de estos sentimientos son:
Es un sector para ancianos, analfabetos o personas que no tienen nada que hacer; la agricultura es una ocupación inferior, apropiada para los ignorantes o los jubilados;
Los jóvenes saben que con la agricultura pueden ganarse la vida, pero la consideran sólo como el último recurso, una vez que intentaron todo lo demás y fracasaron;
Los jóvenes se muestran impacientes por ganancias rápidas y la agricultura no puede ofrecer la deseable “solución rápida”. Para muchos jóvenes la agricultura es vista como la última opción y “no es siquiera mi profesión”, “no es de nuestra cultura – los hijos no lo ven tan cool”.
Testimonio de jóvenes que no quisieron dar sus nombres
– En esta aldea todos somos pobres, mi padre, mi tío, hasta mi abuelo, ya fallecido, era pobre. ¿Por qué yo querría seguir sus pasos y también morir pobre, cultivando la tierra?
– Los padres dicen también que mandan a sus hijos a la escuela para que encuentren un “trabajo mejor” que la agricultura.
– Existe la idea de que el sector tiene sus riesgos: a causa de las calamidades naturales, por los mercados que son o no inestables y donde los beneficios son escasos;
– El acceso de los jóvenes a la tierra es un problema; por lo general, la tierra es controlada por ancianos y las prácticas de la herencia tienden a restringir el beneficio tal vez a la herencia más antigua. Los otros tienen que irse o poner todo su esfuerzo en pequeñas parcelas; las mujeres jóvenes pueden perder hasta lo mínimo si quieren casarse con un extraño (lo contrario puede suceder en sistemas matrilineales).
– El acceso a otros recursos también es muy problemático, sobre todo para el financiamiento: con respecto al crédito, el joven no tiene antecedentes en los cuales el banco pueda confiar y ninguna garantía para respaldar los préstamos; con respecto al acceso a la tecnología, los servicios de extensión se otorgan a los agricultores ancianos que son dueños de la tierra; en el acceso al conocimiento, en las escuelas no se enseña la agricultura de manera significativa.
– Los jóvenes no tienen conocimientos técnicos: en algunos países, es difícil que la agricultura se aprenda en las escuelas. Incluso los que estudian agricultura prefieren ser técnicos en asesoramiento a los agricultores, y no ser agricultores ellos mismos.
– El apoyo gubernamental direccionado a los jóvenes del sector es pobre y escaso.
UNAC Mozambique
La juventud de la UNAC – Unión Nacional de Campesinos de Mozambique – con el objeto de revertir la situación respecto de la participación de los jóvenes y convertirse en una VOZ ACTIVA, sea a nivel de la base y en las instancias superiores de los gobiernos de los países, creó una Comisión Nacional de Jóvenes integrada por hombres y mujeres jóvenes de todas las provincias del país.
– Participamos en los eventos más destacables de la UNAC junto a LVC, adentro y afuera del país.
– En el marco del encuentro de SADC, en agosto de 2013 en la ciudad de Pretoria, Sudáfrica, participamos en la divulgación del estudio realizado por los consultores contratados por SACAU sobre Juventud y Género en África,.
– Los jóvenes participan en las actividades de capacitación sobre: Agro-ecología, Soberanía Alimentaria, Semillas, Agricultura de conservación, etc., que promueve LVC y la UNAC.
– Los jóvenes participan de los intercambios de experiencias dentro y fuera del país, que promueve la UNAC y LVC.
– Los jóvenes practican la Agricultura de Conservación en sus campos, aunque la participación es escasa debido a la falta de incentivos por parte del gobierno.
– Actualmente en la UNAC se está realizando una recolección de datos estadísticos para establecer el porcentaje de participación de los jóvenes y se están creando comisiones provinciales destinadas a la articulación de los jóvenes en el nivel de base.
PRINCIPALES MENSAJES
Para el éxito futuro, es necesario que la sociedad se ocupe del tema de la agricultura, para que sea una actividad atractiva. Hacer esto de manera efectiva requerirá una comprensión más profunda de los problemas de imagen y separar los síntomas de las causas subyacentes de los problemas de la imagen de la agricultura. Como fuerza de trabajo no remunerado en los períodos de cultivo, pero también puede servir como jornaleros para ganar un salario. Cada vez más la juventud rural se deslocaliza hacia las ciudades en busca de trabajo. Un estudio de la FAO de 2011 afirma que la agricultura es el sector principal para el empleo de los jóvenes.
Por el momento el compromiso de los jóvenes con la agricultura es mínimo. Es necesario poner en práctica estrategias deliberadas para asegurar que los jóvenes se involucren. Incluso con la reforma agraria muy pocos jóvenes se beneficiaron, lo cual minimiza nuestra participación en el sector agrícola. Es muy común la migración hacia las ciudades o hacia y desde los países vecinos – por ejemplo Sudáfrica, Botswana, Zimbabwe – en busca de empleo.
Consecuencias de estos problemas:
– Escasa adhesión de jóvenes a la agricultura;
– Baja generación de ingresos;
– Visión negativa de la agricultura;
– Otras opciones disponibles;
– Limitaciones externas (clima, plagas y enfermedades, inseguridad);
– Dificultades de acceso a los recursos (financieros, equipamientos…).
Para atraer a mujeres y hombres jóvenes a la agricultura, se sugirieron las siguientes medidas:
– Mejorar la información, la comunicación y la tecnología;
– Prestamos disponibles y accesibles / bonificados, con requerimientos limitados respecto de las garantías;
– Sistemas de información de mercado para los productos agrícolas;
– Sistemas desarrollados de marketing;
– Disponibilidad de tierras con DUAT y sistemas de riego;
– Mejorar las vías de acceso para el flujo de productos agrícolas;
– Capacitación en negocios para que los jóvenes adquieran habilidades en agricultura;
– Promover la Agricultura de Conservación – Agro-ecología, valorización de la semilla criolla, extensión adecuada y servicios técnicos;
– Oportunidades de trabajo agrícola, específicamente para los jóvenes (asalariado).
Fuentes:
Jóvenes de África
Países: Mozambique, Tanzania, Sudáfrica, Madagascar, RDC, Zimbabwe, Malí, Senegal y Malawi.