Llamamiento Urgente a la Acción en Solidaridad para con el Pueblo Palestino: Condenamos el asesinato de los familiares del Líder de la UAWC, pedimos Justicia!
¡Exigimos que se detenga la guerra de ocupación de gaza por parte del estado de Israel y la masacre indiscriminada de civiles palestinos!
(Harare 24 de Julio de 2014) El pasado domingo por la tarde (20 de julio), las Fuerzas Aéreas israelíes derribaron la casa de Saad Ziada, matando a seis de sus parientes (su madre, tres hermanos, su cuñada y un nieto). En el momento del ataque, Ziada no se encontraba en el domicilio, lo que le salvó la vida. Saad Ziada es líder de la Unión de Comités de Trabajo Agrícola (UAWC), miembro de La Via Campesina.
Este suceso ocurrió dos días después de que La Via Campesina hiciera un llamamiento solidario condenando la guerra ilegal del Gobierno israelí para la ocupación de Gaza y los ataques dirigidos contra civiles palestinos, lo que constituye un crimen de guerra que vulnera el derecho internacional.
Lo ocurrido deja patente que el pueblo palestino está haciendo frente a unas tremendas amenazas y a un exterminio extrajudicial, mientras la comunidad política internacional sigue guardando un vergonzoso silencio. Entre tanto, los movimientos sociales han denunciado globalmente esta expresión reciente del castigo colectivo a los palestinos de Gaza. Esta agresión en que el 80% de las víctimas fueron palestinas, junto con el asedio y el cierre permanentes de Gaza, representan una clara violación del derecho internacional humanitario.
Por ello, La Via Campesina expresa su solidaridad a Saad Ziada y exige justicia para la familia de Ziada y todas las familias que han sido víctimas de tan atroces ataques dirigidos. Transmitimos, asimismo, nuestra solidaridad y nuestro sentimiento de indignación a todas esas familias: niños, mujeres y hombres asesinados intencionadamente, todos los días, como víctimas de los crímenes incesantes contra la humanidad perpetrados por el Estado de Israel.
– Exigir justicia para Saad Ziada, su familia y todos aquellos que han perdido a un ser querido, han sufrido heridas graves, han sido desplazados y cuyas propiedades y bienes han sido destruidos por la ocupación israelí y la intervención militar deliberada contra las personas civiles.
– Sumarnos a los distintos actos de protesta que los movimientos sociales de todo el planeta están organizando a fin de exigir el fin de esta guerra dantesca contra el pueblo palestino y de la ocupación israelí, así como para reivindicar activamente el respeto al derecho y los tratados internacionales, incluido el Cuarto Convenio de Ginebra relativo a la Protección de Personas Civiles en Tiempo de Guerra.
– Unirnos a la iniciativa lanzada por personajes públicos y la comunidad intelectual, incluidos premios Nobel, que exige que las instituciones internacionales denuncien la ocupación y agresión ilegales de Israel que infringen el derecho internacional humanitario.
– El Estado de Israel no podría continuar asaltando Gaza si el Gobierno estadounidense no diera su aprobación, un gobierno que, anualmente, presta ayuda militar a Israel por un valor de 3.000 millones de dólares que son empleados para adquirir armamento de las multinacionales que, a su vez, se benefician de esta guerra permanente. De ahí que apoyemos los llamamientos que promueven los boicoteos, el cese de las inversiones y las sanciones sobre los productos y las corporaciones que sacan provecho de la ocupación continua israelí de Cisjordania, Gaza y Jerusalén Oriental.