(23 de Octubre 2020) Entre las corporaciones transnacionales, los Estados y los pueblos existe una asimetría innegable. Por un lado, con la connivencia de los Estados, interesados en asegurarse de “atraer inversiones”, las corporaciones transnacionales se han estado cubriendo con una armadura sólida de tratados de libre comercio y acuerdos de protección de las inversiones con sus respectivos mecanismos de sanciones. Instituciones como el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) presentan un ejemplo claro de la privatización de la justicia, tanto como cualquier mecanismo de arbitraje de diferencias Estado-inversor. Por otro lado, las violaciones a los derechos humanos y los derechos de los pueblos y la naturaleza son ya sistémicas e inherentes a las operaciones de corporaciones transnacionales. Sin embargo, a nivel internacional no existen normativas vinculantes para corporaciones sobre derechos humanos.
En junio de 2014, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó la resolución 26/9 sobre la redacción de un instrumento internacional jurídicamente vinculante que regule a las empresas transnacionales (ETN) y otras empresas con respecto a los derechos humanos.
Este fue un logro histórico luego de décadas de debates e intentos fallidos dentro de las Naciones Unidas. Un instrumento jurídicamente vinculante como este es esencial en dos dimensiones de trabajo de la Campaña Global: para poner un fin a la impunidad corporativa y para abordar el poder sistémico de las corporaciones transnacionales que ha llegado a tener un impacto sin precedentes en la vida cotidiana de las comunidades afectadas.
La Vía Campesina, como movimiento que representa a campesinxs, pueblos originarios, trabajadorxs migrantes y millones de productorxs de alimentos a pequeña escala de más de 80 países, ha tenido un papel activo en colocar las demandas de la Campaña Global. Como movimiento hemos contribuido activamente a las propuestas del tratado preparadas por organizaciones de la sociedad civil.
Últimas novedades:
En agosto de 2020, la presidencia del OEIGWG (grupo de trabajo intergubernamental de composición abierta, por sus siglas en inglés) publicó el 2do borrador revisado del Tratado Vinculante de la ONU. La Campaña Global, de la que es parte La Vía Campesina, ha publicado su primer declaración sobre el 2do borrador revisado.
La ‘Movilización Popular 2020 sobre el #TratadoVinculante’ coincide con la 6tha sesión del grupo de trabajo intergubernamental de composición abierta (OEIGWG), mandatado a redactar el Tratado Vinculante de la ONU sobre empresas transnacionales y otras empresas con respecto a los derechos humanos.
Al igual que cada año desde la aprobación histórica de la resolución 26/9 (2014) del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la Campaña vuelve a presionar a los gobiernos a continuar el proceso de construir el Tratado Vinculante y avanzar.
Durante todo octubre y noviembre de este año, miembros y aliadxs de la campaña organizarán actividades virtuales relacionadas con la lucha contra la impunidad corporativa y en apoyo al Tratado Vinculante de la ONU. Consulta el calendario aquí.
