Brasil: Toda nuestra rebeldía cuando matan a un Sin Tierra

Márcio Matos, dirigente del MST y referencia política en la lucha por la tierra en la provincia de Bahia, fue asesinado en su casa en el Asentamiento Boa Sorte, en Iramaia, región de la Chapada Diamantina.

De la página del MST

(25 de enero de 2018) En la noche del pasado miércoles (24), el MST recibió la noticia de que un compañero de lucha más había sido asesinado. Márcio Matos, dirigente del MST y referencia política en la lucha por la tierra en la provincia de Bahia, fue asesinado en su casa en el Asentamiento Boa Sorte, en Iramaia, región de la Chapada Diamantina.

Al mismo tiempo que, en la actual coyuntura política, la clase trabajadora enfrenta graves retrocesos y retirada de sus derechos, el campo brasileño también sigue liderando las estadísticas de violencia. Hecho que está íntimamente relacionado con la ofensiva del capital en estos territorios. “La muerte del compañero se suma al triste escenario nacional de violencia contra los trabajadores y trabajadoras del campo. 2017, según la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), fue un año sangriento”, afirma la nota del Movimiento sobre el caso.

Según la CPT, en 2017 por lo menos 65 personas fueron asesinadas en conflictos en el campo, en muchos casos con expresiones de crueldad.  Este índice confiere a Brasil el título de país más violento para las poblaciones campesinas en el mundo.

El Movimiento Sin Tierra de todas las provincias de Brasil se solidariza con los familiares del compañero y afirma que “este es un momento de luto, pero también de lucha. Por ello, exigimos que la Justicia empiece inmediatamente las investigaciones sobre el asesinato de Márcio. No permitiremos que esta muerte quede impune y daremos continuidad a la lucha popular realizada por él en las más diferentes trincheras”.

Y los pueblos del campo siguen enterrando a sus muertos. Sin embargo, sin temer a “los señores que les amenazan, con fusiles y con cañones”.

A continuación, la nota integra:

Es con pesar y revuelta que recibimos la triste noticia del asesinato del compañero Márcio Matos (33), dirigente del MST y referencia política en la lucha por la tierra en la provincia de Bahia. “Marcinho”, como era conocido, fue asesinado en la noche del presente miércoles (24) en su casa, ubicada en el Asentamiento Boa Sorte, en Iramaia, región de la Chapada Diamantina. Según relatos de los familiares y amigos, al dirigente le dispararon tres veces delante de su hijo.

Oriundo de Vitória da Conquista, en el sudoeste baiano, Márcio se tornó uno de los principales líderes Sin Tierra de la provincia, conocido por la articulación con los partidos de izquierda y movimientos y organizaciones populares. En el MST asumió la dirección nacional aún joven y permaneció en esta tarea ocho años, destacándose por su perfil de movilizador de las masas.

Padre, campesino, hijo de la clase trabajadora y comprometido con la transformación social, Marcinho asumió, en el último período, la Secretaria de Administración de Itaetê y contribuyó directamente con la Izquierda Popular Socialista (EPS), corriente interna del Partido de los Trabajadores (PT).

En muchas de las conquistas que tuvimos en los últimos años, Márcio estuvo como uno de sus ideólogos, poniendo en práctica principios como la solidaridad y el compañerismo sin dejar pasar desapercibidos valores forjados en el seno de las luchas, como la sensibilidad política, la comprensión, el dialogo y una incansable capacidad de indignarse ante las injusticias.

La muerte del compañero se suma al triste escenario nacional de violencia contra los trabajadores y trabajadoras del campo. 2017, según la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), fue un año sangriento. “El contexto vivido por los pueblos de la tierra, de las aguas y de las forestas exigió insistencia, resistencia y cuestionamiento sobre el papel del Estado”, explica la entidad. Frente a ello, la CPT señala algunos datos parciales sobre la violencia en el campo. Según la Comisión fueron 65 personas asesinadas en conflictos en el campo, en muchos casos con expresiones de crueldad. Este índice confiere a Brasil el título de país más violento para las poblaciones campesinas en el mundo.

El cruel asesinato de Marcinho nos recuerda que hace cinco años perdimos al compañero Fábio Santos, que también era dirigente de esta organización. Fábio fue asesinado con 15 disparos delante de su compañera e hijos, en medio del recorrido que realizaba entre la sede del municipio de Iguaí y el distrito de Palmeirinha, ambos en la región sudoeste de Bahia. Hasta ahora nadie ha sido encarcelado y la impunidad persiste.

Este es un momento de luto, pero también de lucha. Por ello, exigimos que la Justicia empiece inmediatamente las investigaciones sobre el asesinato de Márcio. No permitiremos que esta muerte quede impune y daremos continuidad a la lucha popular realizada por él en las más diferentes trincheras.

Nos solidarizamos con los familiares, amigos y toda la militancia Sin Tierra que se encuentra movilizada en los asentamientos y campamentos distribuidos por toda Bahia y juntos haremos que nuestro llanto de repudio sea escuchado. Por ello, seguiremos en marcha, con la cabeza erguida, contra el capital, el agronegocio y en defensa del Socialismo, para que la sangre de los trabajadores, que pinta nuestra bandera de rebeldía, sea una razón más por la que permanecemos en la lucha.

Considerando que los señores nos amenazan

Con fusiles y con cañones

Nosotros decidimos: de ahora en delante

Temeremos más a la miseria que a la muerte.

Bertold Brecht

 

Compañero Marcinho,

Presente, presente, presente!

 

Dirección Estatal del MST en Bahia

25 de enero de 2018

*Editado por Iris Pacheco

**Traducido por Amanda Verrone