Brasil, Agencia Nacional de Agroecología debate alternativas para el agronegocio
Domingo 17 de Junio de 2012
Comunicación de Convergencia de Medios de los Movimientos Sociales- Vía Campesina
La Agencia Nacional de Agroecología (ANA) realizó durante los días 15 y 16, como parte de la Cumbre de los Pueblos, el seminario “Agricultura familiar y Campesina y Agroecología como alternativa a la crisis del sistema agroalimentario industrial”. La primera mesa tuvo como tema la Crisis alimentar mundial y desafíos a la soberanía alimentaria. Participaron del debate Aksel Naerstad, de la Coalición More and Better; María Emilia Pacheco, de FASE/Conselho – Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional en Brasil; Pat Mooney, Miembro del Grupo de Acción sobre Erosión, Tecnología e Concentración (ETC, sigla en inglés). La mesa fue coordinada por Jean Marc Von der Weid, de Agricultura Familiar y Agroecología (AS-PTA).
Aksel inició el debate indagando que tipo de crisis alimentaria el mundo sufre hoy. “La crisis alimentaria es algo permanente: en 1992, a la época del Rio92, habían 858 millones de personas que padecían del hambre. Hay mucho alimento en el mundo para alimentar el doble de la población mundial. Parte de este alimento se pierde en su almacenamiento, otra parte es utilizada para la alimentación de animales, a parte del desperdicio en los restaurantes que, si se fuera evitado, podría alimentar al 1 billón de personas que padecen de hambre. Él nos llama la atención a que la verdadera crisis está en la concentración del poder en las pocas multinacionales de alimentos, que acaban con la diversidad alimentaria y contaminan el medio ambiente debido a la utilización de agrotóxicos y fertilizantes.
La lógica que impone estas grandes industrias es apuntada por Aksel como un gran problema para la posibilidad del avance de la agricultura familiar. “El propio sistema crea la crisis. La OMC obliga la importación de alimentos, lo que imposibilita el desarrollo de la agricultura local. En Noruega, por ejemplo, comemos muchas papas, pero no las papas nacionales, porque la mayoría viene de otros países europeos”.
Finalmente, se clausuró el debate afirmando que los gobiernos no pueden seguir invirtiendo en el agronegocio. “Sí hay maneras i de producir alimentos, como por ejemplo la agroecologia. Es necesario que las políticas gubernamentales cambien para posibilitar que este nuevo modelo de producción pueda florecer”.
Pat Mooney inició su exposición analizando la Rio+20: “la Cumbre oficial es un fiasco, el cuerpo diplomático que están allá participando no tienen la respuesta para solucionar la crisis. Hace veinte años, en la Rio92, la discusión era como los países del norte podían controlar la biodiversidad del sur. Hoy, los países del norte quieren tener lo que se quedo de la naturaleza para que puedan explotar”. Pat dice que no existe otra manera de resolver la crisis climática sin el desarrollo de la agroecología. “La industria no tiene flexibilidad para sustentarnos. Para cada caloría de comida producida por la industria, se gasta cuatro calorías de energía, lo que resulta en emisiones contaminantes. En la producción campesina, la proporción es de una caloría de alimento para una caloría de energía”.
Aparte, el apunta que el sistema agroecológico trabaja con mas diversidad de especies de animales y vegetales, y que tampoco patenta los productos que se crea, como es hecho en el proceso industrial. También criticó la investigación en relación a la agricultura. “Antes era necesario un millón de dólares para crear un organismo genéticamente modificado; hoy, es necesario más de 136 millones de dólares para que se cree un transgénico. Es un investimento tonto”. Pat dice que “mi generación es la primera del planeta que perdió mas conocimiento de que ganó. Pero aun tenemos mucho y podemos revertir esta situación”, refiriéndose a las técnicas campesinas que fueron siendo destruidas debido al éxodo rural e imposiciones industriales.
En su clausura, afirmo que no vamos sobrevivir a una crisis ambiental con el sistema agrario que tenemos, y pidió que los agricultores del mundo se unifiquen para compartir conocimiento y diversidad de especies.
Según María Pacheco, la crisis alimentaria es el enlace más dramático del conjunto de crisis que estamos actualmente viviendo, porque el propio valor de la vida está en crisis. Para ella, el alza de los precios debido a la especulación, que vuelve los alimentos en mercancías y “genera un contexto mundial en lo cual una de cada siete personas padece de hambre”. Lo que preocupa a María en relación a las soluciones apuntadas por el capital para la crisis económica es que estas “se refieren al saber tradicional de los pueblos indígenas y campesinos como algo que debe ser incorporado al mercado para resolver la crisis. Eso se da porque estos nuevos conocimientos de mercado quieren privatizar incluso el conocimiento natural”.
María acredita que el sistema agroecológico solo va a ser implementado por vía de mucha lucha social por parte de los movimientos. “Los sistemas agroecológicos tienen un índices de mayor producción y reducen la pobreza rural. Es con la agroecología que los campesinos logran su subsistencia sin tener que pasas por las reglas del mercado”, y termina llamando la atención a la importancia de la Reforma Agraria para que se establezca la agroecología. “La reforma agraria es esencial. Sin el acceso a la tierra no hay como garantizar el derecho a la vida. Es fundamental que el movimiento ecológico se unifique a la lucha por la tierra”.