En los últimos 40 años Colombia no registraba una movilización social de la magnitud del Paro del 28 de abril, cuya única respuesta por parte del Estado fue la violencia: se han verificado 89 homicidios, 192 desapariciones forzadas, 1.929 personas heridas, 106 personas víctimas de violencias basadas en género, 3.546 detenciones de manifestantes[1] y 200 casos de criminalización de manifestantes.
Desde que iniciara el Paro más de 200 miembros de primeras líneas han sido capturados, la mayoría de los casos bajo delitos como terrorismo o concierto para delinquir. Uno de los primeros hechos registrados fue la captura de 14 manifestantes a finales de abril de 2021, quienes también fueron golpeados y torturados por miembros de la fuerza pública[2].
A finales del mes de octubre e inicios del mes de noviembre de 2021 se presentó el caso de 5 miembros de la primera línea en Bogotá quienes, luego de varios tropiezos técnicos, fueron acusados por delitos de terrorismo y hurto[3]; así como el caso de 13 jóvenes líderes comunitarios, que a juicio de la Fiscalía habrían convocado, incitado y realizado actos de terrorismo, violencia contra servidor público, daño en bien ajeno y lesiones personales[4].
En el departamento de Boyacá, a mediados del mes de noviembre de 2021 se realizaron capturas masivas de jóvenes de primera línea. Se llevaron a cabo varios allanamientos por parte de la policía judicial a diferentes viviendas de jóvenes que participaron en el paro, registrándose la captura de 3 personas por la presunta comisión del concierto para delinquir, tenencia de elementos peligrosos y agresión a empleado oficial[5], entre las capturas, se produjo la de un joven líder ambientalista, asociado con políticos y movimientos de oposición al gobierno.
La criminalización y persecución judicial que están sufriendo las y los miembros de primeras líneas es tal que los “escudos azules” una primera línea de Bogotá, ha solicitado medidas cautelares que brinden seguridad física y jurídica ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Estos hechos se suman a la persecución judicial que sufren líderes y organizaciones campesinas, evidenciando una práctica sistemática que mina la participación política de sectores populares.
[1] Según información de la Campaña Defender la Libertad. Ver: El sometimiento de la democracia. Un balance del derecho a la protesta social en Colombia en el año 2021. Disponible en: https://documentcloud.adobe.com/link/track?uri=urn:aaid:scds:US:6710a368-d494-4597-92f9-f5a51177aa54#pageNum=1
[2] En libertad los 14 detenidos por vandalismo en medio de las protestas. El Heraldo. Abril 30 de 2021. Disponible en: https://www.elheraldo.co/colombia/declarada-ilegal-la-captura-de-los-14-manifestantes-del-paro-813487
[3] Legalizan captura de presuntos integrantes de la ‘primera línea’ en Suba, acusados de terrorismo. Revista Semana. Edición del 29 de octubre de 2021. Disponible en: https://www.semana.com/nacion/articulo/legalizan-captura-de-presuntos-integrantes-de-la-primera-linea-en-suba/202100/
[4] Capturados 13 presuntos integrantes de la primera línea señalados de vandalismo. El País. Edición de 9 de noviembre de 2021. Disponible en: https://www.elpais.com.co/colombia/capturados-13-presuntos-integrantes-de-la-primera-linea-senalados-de-vandalismo.html
[5] Allanamientos a viviendas de jóvenes que participaron en el paro nacional de Paipa. W Radio. Nota del 22 de noviembre de 2021. Disponible en: https://www.wradio.com.co/2021/11/22/allanamientos-en-viviendas-de-jovenes-que-participaron-en-el-paro-nacional-en-paipa/